¿Quieres encontrar la mejor base para tu escultura, pero no sabes qué tipo de base elegir ni a qué profesional acudir? ¡Artsper te guía en la selección de la base ideal gracias a su asesoramiento experto!
Para exhibir y resaltar tu escultura de manera elegante, puedes utilizar una base. Pequeña o grande, de metal o cristal, te ayudamos a elegir la presentación que mejor se adapte a tu escultura.
Elegir una base puede ser complejo. Compartimos nuestras recomendaciones para que encuentres la que mejor se adapte a tu obra.
¿Cómo elegir la mejor base?
La base es esencial para las esculturas, ya que nos ayuda a situarlas en nuestro campo visual. También permite delimitar un espacio específico para la obra. Debemos poder caminar alrededor de ella, dar un paso atrás y familiarizarnos con el volumen completo.
Para definir las dimensiones ideales, es necesario saber qué tipo de escultura se colocará sobre la base. En cuanto a su altura, es importante saber dónde se colocará. Se recomienda elegir una base más ancha que la base de la escultura para que no cubra toda la superficie de la base y deje unos centímetros de espacio alrededor de la obra.
Esculturas < 50 cm
Muchas esculturas pequeñas encontrarán su lugar en una base de 20 x 20 cm. Una escultura pequeña, estrecha y ligera con una base fina creará un conjunto muy elegante sobre un pedestal de estas dimensiones. Para tener una vista detallada y óptima de una escultura pequeña, elige una altura de base entre 110 cm y 120 cm.
Las dimensiones de 30 x 30 cm suelen ser ideales para esculturas un poco más grandes, ya que la base es lo suficientemente ancha para soportar la obra de arte sin recargar la habitación en la que se encuentra.
Esculturas > 50 cm < 200 cm
Si tu escultura ya es grande y solo requiere una base para asentarse sin elevarse, elige una base lo suficientemente grande como para proteger y soportar la escultura, y relativamente cercana al suelo para poder disfrutar plenamente de la obra a nivel de los ojos.
Si la escultura es larga, puedes optar por una base con las mismas dimensiones (longitud, ancho) para ofrecer la ilusión de una extensión de tu obra en la altura que más te convenga.
Esculturas > 200 cm
Para esculturas verticales, se recomienda optar por una base de entre 35 y 95 cm de altura para no alterar la apreciación de la obra.
Lo que debes recordar para las dimensiones de la base:
Prefiere una base cuya anchura sea ligeramente mayor que la base de tu obra para darle espacio sobre el soporte. El propósito de la base es apoyar la obra sin proyectar sombras sobre ella. Resáltala como si fuera una parte integral de la escultura.
Si la obra se exhibe en una sala grande con paredes blancas, para crear un ambiente moderno y elegante en la habitación, puedes optar por pedestales altos e imponentes. En una sala más pequeña, elige un formato de base más pequeño, alrededor de un metro de altura.
Si tu sala ya tiene muebles a una altura de un metro, elige bases de diferentes tamaños para variar las alturas y hacer que la visita a la sala sea más agradable.
¿Qué tipo de base debo elegir para mi escultura?
Las bases están disponibles en diferentes materiales: madera, metal, hierro, cristal, acrílico. Se trata de determinar cuál es el más adecuado para tu escultura. Esto dependerá principalmente del espacio en el que se exhibirá la obra.
Si tu estilo es minimalista, elige soportes para resaltar tu escultura. El soporte es moderno y discreto, ideal para obras de hierro, bronce o acero.
Si prefieres un estilo más rústico, puedes optar por bases de madera natural. Son más imponentes y, por lo tanto, ideales para esculturas grandes, como las de mármol o metal.
Para un estilo ultra moderno, puedes elegir una base de acrílico. Este tipo de base es perfecto para exhibir una escultura pequeña, alrededor de la cual puedes girar para apreciar los detalles de la obra y la atención al detalle del artista.